miércoles, 29 de octubre de 2014

Los traductores no debemos apurarnos

Nos dicen que sólo nosotros usamos esa expresión en el sentido de ir corriendo, de no tener tiempo, de tener urgencia para algo. ¿Está mal? ¿Es sólo un localismo? 

Analicemos estas expresiones y cómo las define el DRAE:

Apuro, apremio, presura
apurar (de puro): averiguar o desentrañar la verdad ahincadamente o exponerla sin omisión; extremar, llevar hasta el cabo; acabar o agotar; apremiar, dar prisa (en América, también darse prisa); molestar a alguien de modo que se enfade o pierda la paciencia; purificar o reducir algo al estado de pureza separando lo impuro o extraño; en lo referente a la moral, purificar, santificar; sufrir hasta el extremo; examinar atentamente; afligirse, acongojarse, preocuparse.
apuro (de apurar): aprieto, conflicto, dificultad; estrechez, escasez, penuria; apremio, prisa, urgencia; vergüenza, reparo.
apremiar (de premia [de premiar2: (antiguo) apremio, fuerza, coacción; urgencia, necesidad, precisión]): dar prisa, compeler a alguien a que haga prontamente algo;
oprimir, apretar; compeler u obligar a alguien con mandamiento de autoridad a que haga algo; imponer apremio o recargo.
apresurar (de presura [del lat. pressūra: opresión, aprieto, congoja; prisa, prontitud y ligereza; ahínco, porfía]): dar prisa, acelerar.
Prisa

Existen las expresiones a prisa, de prisa, darse prisa, meter prisa, tener prisa, y también, como palabras individuales, aprisa y deprisa, con la misma definición.
prisa (de priesa [del lat. pressus, part. pas. de premĕre, estrechar]): prontitud y rapidez con que sucede o se ejecuta algo; necesidad o deseo de ejecutar algo con urgencia (...).
deprisa (de de y prisa): con celeridad, presteza o prontitud.
aprisa (de prisa): con celeridad, presteza o prontitud.
En Argentina decimos:
      Apurate, que se va el tren
      Se fue porque estaba muy apurada.

Apurarse es un argentinismo. Y como vemos, apuro proviene de puro, no tiene que ver con la urgencia. El diccionario habrá recogido luego nuestro uso (en la cuarta acepción), pero el origen de la palabra no se relaciona. Lo correcto, o al menos, lo que deberíamos utilizar en un español neutral, sería:

      Apresúrate,/ Date prisa,/ De prisa, que se va el tren.
      Se fue porque tenía mucha prisa / iba muy a prisa. 

Vísteme despacio que estoy apurado 

Todos la hemos oído alguna vez. Esa es nuestra versión; en otros países es Vísteme despacio que voy de prisa o que tengo prisa, claro. ¿De dónde proviene?

En internet aparecen diversos orígenes: se le adjudica al rey Fernando VII de España, a  Napoleón Bonaparte, a Carlos III. Quienquiera que haya enunciado la frase, según la historia, para calmar a un mayordomo o subalterno nervioso (¿tal vez todos la dijeron alguna vez?), lo que parece haber dado origen al concepto es lo que el emperador romano Augusto decía a sus ayudantes: “Apresúrate lentamente”. La idea es la misma: cuanto más apuro (prisa) tengamos, debemos actuar con más lentitud; si nos apuramos (apresuramos), nos equivocamos, nos tropezamos, todo sale mal. Quién no ha comprobado esta verdad en su vida...

En inglés existe el proverbio Haste makes waste (la prisa genera desperdicio), que significa lo mismo: que no se ahorra tiempo al hacer las cosas con rapidez, y acelerar sólo provocará errores que terminarán en derroche de tiempo o en tener que repetir el trabajo.
      “Hurry up and get my car fixed.” 
      “Don't rush me. Haste makes waste.”

Otra frase en ese sentido sería “More haste, less speed” (cuanta más prisa [tengas], [utiliza] menos velocidad), que al parecer se utilizó en letreros viales en el Reino Unido.

Me gustó el proverbio chino que encontré sobre el tema: “Un hombre con prisa bebe su té con tenedor

No hay comentarios:

Publicar un comentario